Los Servicios Sociales de Atención Primaria constituyen el primer nivel de atención del Sistema Público de Servicios Sociales. Se estructura en áreas y zonas para que la ordenación de estos servicios ofrezca una mayor cobertura a la población en sus necesidades básicas.
Por un lado, existen las zonas del Plan Concertado, constituidas por los municipios con una población superior a los 3.500 habitantes, suscribiendo los ayuntamientos un convenio marco con la Consejería de Bienestar Social. Se ha incrementado tanto la aportación financiera a los municipios como ampliado el tiempo de vigencia de los convenios para ofrecer una mayor estabilidad. Por otro lado, las zonas del Programa regional de Acción Social (PRAS), para municipios con una población inferior a los 3.500 habitantes, cuentan con un/a trabajador/a social contratado por la Consejería, que atiende a un grupo de municipios.
La dotación de las estructuras básicas de servicios sociales es un aspecto fundamental. Castilla-La Mancha cuenca con un profesional por cada 2.500 habitantes. Una ratio que ha mejorado desde las cerca de 3.600 de 2012 y las 2.760 de 2017. No obstante, es un aspecto a seguir reforzando.
En este sentido, en abril de 2023 el Gobierno regional destina cuatro millones de euros para contratar a 48 profesionales que refuercen la protección de la infancia y la adolescencia ante la violencia. Por otro lado, se han reforzado los servicios sociales además de la creación de 24 equipos que dan cobertura a todos los municipios, compuestos de psicóloga y trabajadora social.
En abril de 2024 se publica la Orden que establece los nuevos criterios de financiación para la suscripción de convenios con las entidades locales para la prestación de servicios sociales de atención primaria, que mejora los precios de referencia para la prestación del servicio de ayuda a domicilio.